La semana pasada hacía 40 años de la 1ª llamada de móvil de la historia. Exactamente fue el 3 de Abril de 1973 cuando Martin Cooper, Gerente de Motorola, la realizó. Martin Cooper, en esta primera llamada, desde las calles de Nueva York, contactó con las oficinas de su compañía rival, Bell Labs y la frase que quedó para la posteridad fue: “Joel, this is Marty. I’m calling you from a cell phone, a real handheld portable cell phone.” Cooper se encontraba en la Sexta Avenida de Nueva York a punto de dar una rueda de prensa en el hotel Hilton para anunciar que acababa de realizar la primera llamada de la historia desde un teléfono móvil.
Cooper hizo la llamada con un prototipo del Motorola DynaTac 8000X que pesaba 794 gramos, tenía unos 33 cm. de altura (antena incluida), 4,5 cm. de largo y 8,9 cm. de grosor. Este “móvil” tardaba 10 horas en cargarse y sólo contaba con media hora de batería.
Ahora Cooper, con 84 años (premio Príncipe de Asturias 2009 entre otros premios), sigue al pie del cañón y dirige Dyna LLC, una incubadora de proyectos relacionados con el desarrollo de las redes de telefonía. Aquello fue el fin de una era y el principio de otra, al igual que el fin de era que comienza esta semana: El adiós a Messenger.
En 1999, Messenger, en su primera versión y con sus famosas “caritas amarillas y sus zumbidos”, nos trajo una nueva forma de comunicarnos. Messenger convenció a mucha gente para cambiar de las conversaciones telefónicas al ordenador, tanto en el ámbito particular como en el empresarial. Aunque nadie esperaba que se convirtiera en el símbolo que ha sido.
A mediados de la pasada década, el servicio de mensajería instantánea de Microsoft tuvo un crecimiento enorme. Debido a que nos permitía comunicación en tiempo real, de una forma sencilla y con gente de todo el mundo. Messenger, que nació antes que los smartphones (aunque nos parezca que hace miles de años de esto), fue evolucionando con los años pero no ha acabado de adaptarse a la llegada de los mismos. Y la verdad es que en los últimos años ya no era lo que fue.
De hecho hace ya años que salió al mercado el que al final se ha convertido en su sustituto, Skype. En Agosto de 2003, se lanzó la primera beta pública de Skype, un sistema para hacer videoconferencias, que además permitía el intercambio de archivos y mensajes. El programa se convirtió de pronto en todo un estándar a nivel mundial.
A mediados de 2011 Microsoft anunció la adquisición de Skype por la nada despreciable cantidad de 6.600 millones de euros. En este momento Skype contaba con 280 millones de usuarios activos en todo el mundo. Entonces nadie pensó cual era el trasfondo real de la operación: cambiar Messenger por uno de los grandes culpables de su “apagón”. Y esta semana empieza, definitivamente, ese cambio.
Microsoft lleva meses intentando que sus usuarios migren a Skype pero es esta semana cuando ambas plataformas inician su fusión (dejando la plataforma inutilizada para siempre, con la excepción de China) en un único sistema que mejora a Messenger. Ahora con Skype nos prometen mayor soporte y opciones, como las videoconferencias, donde Skype es un gran experto. Además nos ofrecen llamadas a fijos o móviles, integrar servicios de otros contactos… Y se ofrecen para llegar a muchos usuarios ya que cuenta con versión para Android, Mac, Linux, Windows…
“Este proceso tendrá lugar a lo largo de varias semanas. Comenzaremos con los clientes de idioma inglés y concluiremos con el portugués brasileño el 30 de abril o después”, señala Microsoft en su blog. Pero… ¿Por qué Microsoft ha esperado casi 2 años a empezar a sacarle partido a una compra de más de 6000 millones de euros?
Cuando se anunció la adquisición de Skype muchos usuarios pensaron en su rápida incorporación a la plataforma móvil de Microsoft, pero no fue así. Se comentó incluso para finales de 2011 pero no llegó. Pero hace unos meses en las presentaciones de Windows 8 y Windows Phone 8, Skype ya llegaba integrado en el sistema operativo.
¿Qué han hecho durante todo el tiempo que ha transcurrido desde la compra de Skype? Pues parece ser que en Microsoft se han dedicado a preparar Skype para la misión que empieza esta semana, sustituir a Messenger. En esos meses, se han incorporado a Skype las infraestructuras de las cuentas de Microsoft. Por fuera Skype parece el mismo, las “entrañas” son distintas.
De momento parece que la integración está yendo bien, sin demasiados problemas, aunque hay que estar atentos porque en muchas ocasiones en los cambios masivos de software los ciberdelincuentes aprovechan “el caos” para infectar nuevos ordenadores, como advierte Kaspersky en su web.
Pero entonces… Vale, Microsoft ha decidido cerrar definitivamente Messenger y sustituirlo por Skype. Pero, ¿Por qué ahora? Puede ser que de verdad desde 2011 no hayan tenido tiempo de adaptarlo todo y ya tuvieran pensada esta fecha (mes arriba, mes abajo) desde que adquirieron Skype o también podría ser que hayan pensado aquello de… “A río revuelto, ganancia de pescadores”… Es decir, que hayan aprovechado todos los nuevos modelos de negocio en las plataformas de comunicación en tiempo real, con llamadas, sin llamadas, gratis, o no gratis… para reaparecer y decir aquí estamos, nos hemos reinventado.
En las últimas semanas se han juntado muchos cambios en este campo: Whatsapp empieza a cobrar a los usuarios de las plataformas de Android una cuota anual (Con toda la polémica que ha llevado detrás), además de que se oyen rumores de que el gigante Google quiere adquirir la aplicación; Line empieza a realizar anuncios en la televisión y a comerle cuota de mercado a Whatsapp recalcando que es una aplicación gratuita y además ofrece llamadas telefónicas, y por supuesto nuevas aplicaciones que ofrecen servicios similares que está empezando a abrirse mercado como Spotbros. Y ahora Microsoft nos presenta Skype, que en realidad ya estaba ahí, pero lo revitaliza diciendo que está mejorado y que va a ser el sustituto de Messenger. ¿Casualidad?
¿Quién ganará más cuota de mercado? ¿Skype llegará al nivel de Whatsapp? ¿Conseguirá este último aguantar su cuota de mercado sin ofrecer llamadas y además empezando ahora a cobrar a sus usuarios de Android una tarifa anual?¿Line seguirá incrementando sus millones de usuarios?
Los próximos meses serán interesantes para ver quién se queda con la parte más grande de este pastel.
Yo creo que van a suceder varias cosas con el panorama que tenemos delante:
– Line va a ampliar de forma importante su cuota de mercado (como ya está ocurriendo). Para esto no hay mejor termómetro que preguntar a nuestros círculos cercanos.
– Los 0,89€ de tarifa aplicada por Whatsapp no deberían ser problema contando con su cuota de mercado, es un precio razonable que, seamos realistas, pagamos con creces en “Google Play” por aplicaciones menos usadas en el día a día. El problema no está en el precio sino en que Line parece ser mejor que WhatsApp o, por lo menos, tiene un aire más fresco (al margen de las llamadas como extra)
Por otro lado, el margen que ceda WhatsApp dependerá en un futuro de si Line sigue sus pasos y establece un tarifa -no es nada descabellado-.
– Dudo que Skype pueda tomar cuotas parecidas a los anteriores. Existe la posibilidad obviamente, pero es una aplicación que lleva demasiados años a la sombra y no es tan fácil reflotarla. Debería ofrecer algo realmente novedoso. Al menos, al ser más minoritaria (sin pretender decir que esté en desuso) su gratuidad está asegurada.