¿Quién no ha visto en algún tebeo o película al protagonista golpeando unos puntos concretos en la pared o moviendo unos libros de la librería para que mágicamente se abra un acceso oculto? Quizás surgió de ahí la idea de crear Port Knocking, un script cuyo funcionamiento se podría comparar al de una combinación que permite abrir una caja fuerte.
El objetivo de esta herramienta es habilitar de forma temporal el puerto al que se quiere conectar mediante una serie de llamadas previas a otros puertos (knocks) en un orden determinado. El único requisito previo para que funcione es tener instalado un firewall a nivel local, que será quien habilite y bloquee los accesos realmente. En nuestro caso utilizaremos iptables, el cual ya viene incluido en distribuciones como Debian, junto a iptables-persistent para no perder los cambios que vayamos realizando.